viernes, 27 de enero de 2017

"TODOCAMPISTA" TOTAL

"El objetivo es el Triplete". Así de contundente se mostró ayer Luis Enrique en la rueda de prensa tras la victoria por 5 a 2 contra la Real Sociedad, y confirmó el pase a las semifinales de la Copa del Rey. Evidentemente, matizó que nada está hecho, tal como mencioné ayer en mi artículo, pero que se trata de la meta a conseguir desde el principio de la temporada. Un discurso muy diferente al ejercido desde Madrid en las últimas semanas.

Todo esto viene después de una jornada muy absurda en Madrid donde en sólo dos horas se cambió del prepotente discurso de que la triple corona era blanca a argumentar que el torneo del KO no interesaba al equipo blanco. Toda una contradicción teniendo en cuenta la campaña mediática y el show de frustración presenciado. En Barcelona la percepción es muy diferente, ganarlo todo es un objetivo cuando se defiende la camiseta azulgrana y para ello habrá que trabajar duro. Sólo 7 equipos lo han hecho en 60 años de convivencia de Liga, Copa y Champions.

Pero hoy toca hablar lo que nos interesa. Toca disfrutar de la sublime exhibición que ofreció el Barça ante la Real Sociedad. Cabe destacar a todos, desde la portería al jugador más avanzado. Pero si hay que destacar un nombre, este es el de siempre. Leo Messi. Se acaban las alabanzas. Se acaban los adjetivos. "Todocampista" total. Hay un partido con Messi y otro partido sin Messi. Cuando decida colgar las botas, este deporte será otro y quedará totalmente huérfano.

Pero como he dicho antes hay que destacar a toda la plantilla. Grata sorpresa de Cillessen, autor de paradas de mérito, sólida defensa, centro del campo con un gran Denis Suárez, y una delantera de miedo. Lamentar las molestias de Mascherano, que quizás ha firmado una actuación más bien pobre, y que los árbitros siguen sin estar a la altura. Ciertamente el primer gol viene precedido de una falta de Umtiti, e Iñigo Martínez merecía algo que más que tarjeta amarilla en la jugada del penalti. Entrada salvaje por detrás cortando una ocasión manifiesta de gol. Doble pecado, medio castigo.

Pero la paciencia que hacía mención semanas atrás parece que empieza a sacar su fruto. Era evidente que el rendimiento de este equipo tenía que ir a más a medida que avanzara la temporada. Luis Enrique, y sus preparadores, era consciente de que el esfuerzo de las Super Copas en verano, el Mundial de Clubes en diciembre, y el periodo enero-marzo sin descanso con Liga, Copa y la ida de los octavos de Champions, pasó factura. El equipo llegó cansado a finales de marzo, y suerte que quedó fuera de la Champions se pudo descansar y asegurar La Liga, a pesar de perder 12 puntos de ventaja, y ganar la Copa contra el Sevilla.

Este año será diferente. En Can Barça se ha planificado la temporada teniendo en cuenta lo que pasó el año pasado, y más vale que en Madrid crucen los dedos que no pase lo mismo que con Ancelotti hace dos temporadas. Ahora mismo, a pesar de que el equipo blanco no está jugando mal, las dinámicas están cogiendo marchas contrapuestas. El Barça, toquemos madera, está subiendo un ritmo claramente ascendente no sólo de juego, también de actitud y de moral.

Optimismo, confianza y FELICIDAD que hacen que toda la plantilla vaya a una. Como declaró Rakitic, "se tirarían de un puente por Luis Enrique". Y no he mencionado gratuitamente al jugador croata. Lo he hecho con toda la intención del mundo. Con su suplencia de hoy, la segunda consecutiva, muchas serán las voces que anunciarán enfrentamientos y crisis. Pero yo lo tengo clarísimo. Ivan es un jugador clave en el esquema azulgrana, y no tengo ninguna duda de que el técnico asturiano la está cuidando para que llegue en las mejores condiciones a final de temporada. Lo tengo clarísimo. Tanto, que me tiraría por un puente defendiendo mi opinión.

Toca disfrutar de la victoria. Toca estar contentos del estado de juego, de moral y de nuestro equipo. Toca esperar, con total indiferencia, que nos tocará hoy en el sorteo para el cruce de semifinales. Algunos quieren evitar el Atlético de Madrid. Otros, que es mejor jugar a doble partido. Ya no recuerdan que en los dos últimos enfrentamientos nos han eliminado. Pase lo que pase, debemos tener presente que si el FC Barcelona - Atlético de Madrid es el partido de la Final, se acabará disputando en el Estadio Vicente Calderón. El club colchonero ya expresado el deseo de acoger la Final para despedir su Estadio.

Ahora bien, no caemos en el error de los demás. Vayamos paso a paso. Partido a partido. Queda mucha temporada por jugar. Pero una cosa tengo muy clara. Si el Barça que hemos visto hoy, será lo que veremos lo que resta de temporada, manteniendo la línea ascendente, creo que lo pasaremos muy bien.

Pero quiero terminar destacando un nombre por motivos especiales. Aleix Vidal. No hay cosa que me haga más feliz que ver como el jugador catalán deja atrás toda la negatividad que la rodeaba para convertirse en una pieza dispuesta a sumar. Creo que puede ser un jugador clave en la plantilla en una posición, la del lateral derecho, que no tenemos especialmente cubierta. En sus últimas actuaciones, sólo recuerdo asistencias, un gol, y muchas ganas de participar. "Tots units fem força".


"Desde que me cansé de buscar he aprendido a encontrar". (Nietzsche)

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