viernes, 23 de septiembre de 2016

LA TEORIA DE LA RELATIVIDAD

En la historia del pensamiento y de la filosofía hemos tenido varios autores que han utilizado términos relacionados al relativismo muy diversos. Desde el Relativismo Moral de los sofistas hasta el mismo Albert Einstein y otros autores más actuales. Pueden parecer términos muy complejos y profundos, que lo son, pero al fin al fin son ideas con un objetivo mucho más sencillo. Y es que todo en esta vida es relativo, nada es absoluto, depende de la situación, los intereses, los afectados, puntos de vista etc.

El fútbol no escapa de esta corriente de pensamiento. Sin ir más lejos, las impresiones sobre el empate en el Camp Nou contra el Atlético de Madrid son totalmente relativas a diversos factores. Es evidente, sin embargo, de que tal y como fue el partido, el empate final dejó un sabor amargo a los seguidores barcelonistas, servidor es un ejemplo. Pero debemos ser conscientes de que un empate con el actual subcampeón de Europa entraba a las posibles travesías de los aficionados y expertos del fútbol. Podemos decir lo mismo del empate del Real Madrid contra el Villarreal en el Santiago Bernabéu. Ayer se enfrentaban entre ellos los 4 primeros clasificados de la pasada Liga BBVA, ahora Liga Santander, y candidatos a quedar de nuevo entre las primeras posiciones del campeonato.

Dicho esto, no acabo de entender el alarmismo de unos, sobre todo los barcelonistas, respecto al reparto de puntos de la jornada de ayer. Aunque es cierto que el FC Barcelona fue muy superior a un Atlético que se dedicó a jugar a la expectativa, cerrado atrás, y defendiendo los ataques estáticos del Barça en un marco de 15 metros cuadrados como si fuera un partido de balonmano. A pesar del panorama, el equipo azulgrana logró ponerse s por delante el marcador de la manera que menos esperaba, balón colgado por Iniesta y remate de cabeza de Rakitic, y vio como el partido terminaba en tablas en la única doble error defensivo del partido. Correa no desaprovechó la única ocasión clara de los colchoneros en los 90 minutos.

No acabo de entender el pesimismo culé cuando debemos ser justos y admitir que el Barça ofreció una gran actitud, movió el balón con notable velocidad a pesar de los espacios reducidos, todo combinado con un gran nivel de juego. Sólo lamentar el error defensivo mencionada anteriormente, mostró cierta preocupación por el estado de forma irregular de Javier Mascherano, esperar que los problemas gástricos de Busquets no sean nada, y cruzar los dedos de la lesión muscular de Messi se quede en las tres semanas de baja.

No puedo entender tampoco el resto de puntos de vista inmersos en las críticas injustas y la negatividad. Pero como he dicho antes, todo en esta vida es relativo y es aquí donde puedo entender el regusto amargo del empate de ayer en el Camp Nou. Y es aquí donde puedo ver que la pérdida de los 2 puntos de ayer pesan más si tenemos en cuenta el tropiezo de hace dos sábados contra el Alavés. 5 puntos no sumados en casa en con sólo 5 jornadas de Liga disputadas debería ser preocupante, pero esto sólo ha hecho que empezar y tenemos que tener presente que hemos estado muy mal acostumbrados.

Un equipo como el Barça, que aspira a ganarlo todo, y en este caso la Liga, no puede dejar escapar los puntos en casa, y menos contra rivales como el Alavés. Pero el fútbol es así, no siempre se puede ganar, y la mayor inquietud de esta derrota ha seguido las últimas temporadas como ejemplo. Hemos sido mimados al ver que los 2-3 equipos que han luchado por el título han hecho entre 80 y 100 puntos. Situación que la que debería ser considerada la mejor Liga del mundo no debería dar. Y creo sinceramente que, tras la crisis económica de 2008, los equipos han recuperado algo de terreno y cada vez será más difícil sumar estas cantidades.

Estoy muy convencido de que equipos como el Real Madrid, FC Barcelona y Atlético de Madrid, los tres principales candidatos al título, no tendrán la alfombra roja extendida durante toda la temporada. Este año, veremos cómo estos equipos no suman los 3 puntos con tanta facilidad como los años anteriores, sobre todo en los desplazamientos.

Pero a pesar de todo, esto no es más que una opinión y una teoría. Lo que hay que hacer es mantener la cordura, relativizar todo, y no entrar en pánico por estar a sólo 3 puntos del líder del campeonato. Como se demostró la temporada pasada, aún quedan 33 jornadas de Liga. Esto es muy largo y puede pasar de todo. Calma.



"Si mi teoría de la relatividad es exacta, los alemanes dirán que soy alemán y los franceses que soy ciudadano del mundo. Pero si no, los franceses dirán que soy alemán, y los alemanes que soy judío." (Albert Einstein)

sábado, 17 de septiembre de 2016

PANEM ET CIRCENSES

Hay un dicho castellano, y que me encanta, que reza que “la cara es el reflejo del alma”. Una afirmación llena de significado y que se puede aplicar en muchos ámbitos de la vida. Ya hablemos de política, sociedad, deportes, o de valores humanos más cercanos para nosotros como la amistad, el trabajo en equipo, etc. Y en ciertas ocasiones, como hoy en el partido entre el Leganés y el FC Barcelona podemos encontrar varios ejemplos.

Antes de entrar en detalle sobre el tema que quiero abordar, no quiero dedicarme de manera estricta al fútbol, ​​hay que comentar y felicitar al equipo y al staff técnico para la trabajada victoria conseguida hoy en Butarque. Ha sido un claro ejemplo de que, tal y como comenté la semana pasada, si las rotaciones se hacen con sentido, los automatismos y el rendimiento del equipo no se ven afectados. Ha sido una clara victoria contra un equipo que lo ha dado todo, con y sin balón, para poner las cosas difíciles al FC Barcelona. Grandes momentos de fútbol combinados con momentos más bruscos en los últimos minutos.

Y es en este último aspecto donde quiero entrar en detalle. Con Neymar y los "defensores" del Leganés como protagonistas. Puedo entender que ningún deportista le guste perder por goleada. Puedo entender que nadie le guste perder en su propio estadio. Puedo llegar a entender, aunque en este casi nada, que la impotencia causada por esta clara superioridad se traduzca en juego brusco con y sin balón. Con el balón con disputa aún lo puedo concebir, sin ella ya no tanto. E incluso puedo estar de acuerdo con opiniones, barcelonistas incluidos, que creen que Neymar debería ahorrar ciertos intercambios verbales. El fútbol tiene, a veces, estas cosas.

Ahora bien, no puedo entender, compartir, y mucho menos aprobar y pasar por alto, las reacciones, no sólo de los jugadores, sino también de algunos aficionados y otros "profesionales" que tienen un rol más mediático. Algo no funciona cuando nos animamos con una entrada a Neymar y pedimos que modifique su estilo diferente y original. Reacciones dadas por la aplicación de la violencia contra un jugador que puede gustar más o menos. Y más teniendo en cuenta que, tal como se encuentra la situación en el fútbol actual, justifican el valor de una entrada.

Como he mencionado anteriormente; “la cara es el reflejo del alma". Cuando viajes, en mi caso que he residido en Finlandia y actualmente en Alemania, y conoces diferentes culturas, comportamientos, y visiones de la realidad, te das cuenta que el vivido hoy en Butarque merece una seria reflexión de la dirección que está tomando la cultura general de nuestro país.

Somos un país, hoy por hoy con una población de 45 millones de habitantes. Donde consideramos un arte y un espectáculo el hecho de torturar hasta la muerte a un animal. Donde celebramos como fiesta nacional la conmemoración de una invasión que significó el expolio y la violación de los derechos humanos. Donde consideramos una ilegalidad otorgar a un pueblo el derecho a decidir. Donde miembros de un gobierno fascista disfrutaron la oportunidad de continuar su carrera política con total impunidad. Donde consideramos el Franquismo, una etapa negra de la historia española, un periodo más de la misma. Otros países, como Alemania, no sólo se intenta erradicar del mapa, sino que invierten enormes esfuerzos educativos para advertir a las nuevas generaciones del peligro que conlleva.

Un país donde no sabemos agradecer y valorar el lujo de contar con futbolistas mágicos y diferentes como Neymar. En vez de contemplarlos, disfrutarlos, y aplaudirles, los criticamos, insultamos, silbamos, y no dudamos en venerar las agresiones y provocaciones de los defensores en el intento desesperado de poner freno a su magia. Donde encima nos creemos las palabras de dudosos "líderes de opinión" que justifican estas acciones y no dudan en malgastar esfuerzos en criticar su actitud.

El mundo del fútbol cuenta hoy día con más atletas que futbolistas. Una pena, pero tenemos que admitir que no es fácil ser Neymar, Cristiano Ronaldo, Luis Suárez, Modric, Iniesta, Griezmann, Messi, etc. Por este motivo debemos aprender a valorar estos artistas cuando los tenemos delante. Y personalidades relevantes, como Michael Laudrup, deben utilizar sus grandes conocimientos para defender este tipo de futbolistas. Más teniendo en cuenta, que él también era un mago con el balón en los pies. El crack danés tiene una gran responsabilidad didáctica en este sentido. Ves como su deberían utilizarse para ayudar a la población a adquirir esta apreciación hacia el buen gusto.

Todo sumado pone en evidencia el principal problema que tenemos en este país. En España estamos años luz en términos de educación respecto a otros países del mundo. A menudo nos preguntamos por qué tenemos lo que tenemos. Por qué vivimos en el país en el que vivimos. Pero si tenemos presente este problema no nos constará tanto entender porque somos un país con una tasa de paro casi del 25%. Con un paro juvenil del 52%, con una vergonzosa tasa de fracaso y abandono escolar. Con niveles de corrupción estratosféricos al poder que no sólo no sirven para desacreditarlo, sino que obtienen más votos en las siguientes elecciones.

Debemos ser conscientes de que “la cara es el reflejo del alma”, y ​​eso conlleva que “en el país de los ciegos, el tuerto es el rey."


"Nunca consideres el estudio como una obligación, sino como una oportunidad para penetrar en el bello y maravilloso mundo del saber." (Albert Einstein)

martes, 13 de septiembre de 2016

OCHO SON MULTITUD

Una de las normas capitales de esta vida es que cualquier abuso es perjudicial. Ya hablamos de comida, de bebida, tabaco, alcohol, el consumo de materias primas, etc. Sin embargo, todo controlado en cierta medida, menos el tabaco, es inofensivo e incluso necesario. Como las rotaciones en el primer equipo del Barça por muy mal que haga la derrota contra el Alavés en el Camp Nou el pasado sábado.

Una cosa está clara, si queremos que la plantilla llegue a final de temporada en óptimas condiciones físicas, hay que mover banquillo. Si no es así, pasará como el año pasado donde terminamos agradeciendo la eliminación en la Liga de Campeones contra el Atlético de Madrid. Debemos ser realistas y admitir que gracias al hecho de no tener que jugar entre semana, el equipo pudo recuperar fuerzas para afrontar la recta final de temporada y la Final de Copa del Rey.

Pero Luis Enrique, con el que apoyo de manera incondicional, cometió un error. Un contratiempo que no creo que termine siendo fatal, aún queda un mundo, y vamos equivocados si pensamos que el Real Madrid no cederá ningún punto. Pero debemos tener presente que estamos ante un error de forma, no de concepto.

El fútbol es un deporte de equipo. Evidentemente que en plantillas como la del Barça jugadores como Messi, Iniesta, Suárez, Neymar, etc., son los que marcan la diferencia. Y a pesar de que son humanos y que necesitan descanso, sobre todo con el paso de los años, este fue el error contra el equipo vasco. Prescindir del factor equipo aplicando una rotación que supuso la aparición de hasta 8 jugadores no habituales en el once inicial.

Debemos felicitar a la secretaría técnica para la confección de la plantilla, y estar de acuerdo con el técnico asturiano vez de afirmar que tenemos la mejor plantilla de los últimos años. Es decir, un sublime 11 inicial con múltiples opciones en el banquillo. Pero el equipo es el equipo, con todos los mecanismos que conlleva, y no se puede presentar el once inicial que vimos el pasado sábado.

Las rotaciones se deben hacer cada partido. Así de contundente pesar de lo que se haya leído el párrafo anterior, pero con el fin de no perjudicar al equipo deben limitarse a un máximo de 3 modificaciones por jornada. Es decir, un cambio por línea. La cantidad y calidad de la plantilla lo permite. Y si no hay ninguna duda de que, si se aplican correctamente, y se mantiene la auto exigencia de la plantilla, esta temporada promete ser espectacular.


Luis Enrique es un gran entrenador, una persona inteligente, y por muchoque lo niegue a la rueda de prensa, estoy seguro que de puertas adentro reconoce que se equivocó. Dudo mucho que volvamos a ver una alienación llena de cambios como la del pasado sábado. Y por mucho que digan algunos periodistas, ya sean culés o madridistas, no hay ninguna duda de que el técnico asturiano está totalmente capacitado para dirigir las riendas de esta plantilla.


“No hay nada bueno de lo que no se pueda abusar.” (Gregorio Marañón)